Pasteles de Nata, el postre más dulce de Portugal

Origen de los Pasteles de Nata

Los famosos Pastéis de Nata (Pasteles de Nata) fueron creados por los clérigos del Monasterio de los Jerónimos quienes en 1837 decidieron ponerlos a la venta para sobrevivir. El hecho de que Belém fuera un acceso asegurado para los barcos de vapor, hizo que la fama de los Pasteles de Nata creciera rápidamente.

Vista del Monasterio de los Jerónimos desde el Centro Cultural de Belém

En la época de la revolución liberal de 1820-1834, el monasterio cerró y el pastelero del convento decidió vender la receta al empresario portugués venido de Brasil Domingos Rafael Alves, cuyos descendientes aún mantienen como uno de los grandes secretos culinarios portugueses y tanto su receta como el nombre están patentados.

Actualmente, en la mayoría de los cafés y pastelerías de Portugal se pueden comprar Pasteles de Nata pero sólo los originales pueden ser denominados Pastéis de Belém (Pasteles de Belém).

Ingredientes para cuatro personas

1 paquete de hojaldre.
1 paquete de nata.
50 ml. de leche.
80 gramos de azúcar.
6 yemas.
1 cucharadita de harina maizena (harina de maíz fina).
1 piel grande de limón.
Azúcar en polvo y canela molida.

Preparación de los Pasteles de Nata

1-Enrollar el hojaldre y cortarlo en 10 trozos. Introducirlos en horizontal en moldes de papel. Presionar el hojaldre desde el fondo, de dentro para fuera, con los dedos mojados.

2-En un bol poner la leche y la piel de limón, la nata, las yemas y después la harina y el azúcar. Batirlo todo muy bien. Cocinar a fuego lento removiendo siempre. Retirar del fuego, sacar la piel de limón y verter en los moldes.

3- Cocer en el horno durante 15 minutos o hasta que el hojaldre esté cocido y el relleno se vea tostado.

4- Servir tibios espolvoreados con azúcar en polvo y canela molida.